El sector cementero está haciendo grandes esfuerzos por reducir sus emisiones de CO2. Este esfuerzo es real y está documentado en la Hoja de ruta de la industria cementera española para alcanzar la neutralidad climática en 2050. Desde 2014 a 2021 las emisiones de CO2 se han reducido un 8 %  y un 15% desde el año base, 1990. Son muchas las palancas que se están activando para reducir las emisiones: uso de materias primas descarbonatadas, empleo de combustibles alternativos, desarrollo de nuevos cementos bajos en carbono y a futuro ya se está avanzando en el desarrollo de las tecnologías CAUC (captura, transporte, almacenamiento y usos y transformación del CO2).